¿Cuándo se comenzaron a usar los tanques estacionarios?

El origen y evolución de los tanques estacionarios de gas

En la constante evolución de la tecnología y la búsqueda de mejorar la calidad de vida de las personas, el almacenamiento y uso de energía ha jugado un papel crucial. Dentro de este ámbito, los tanques estacionarios de gas han tenido un desarrollo interesante, convirtiéndose en una solución esencial para el suministro de gas en hogares e industrias. Pero, ¿cuándo comenzamos a utilizar estos contenedores de almacenamiento y cómo han evolucionado con el tiempo?

El inicio

Los tanques estacionarios, como los conocemos hoy, tienen sus orígenes en el siglo XIX, período en el cual la revolución industrial estaba en pleno auge y la demanda de fuentes de energía eficientes estaba en aumento. Si bien, el uso del gas como fuente de energía se remonta a principios de dicho siglo para iluminación y calefacción, el almacenamiento y transporte de gas presentaba un gran desafío.

Fue en la segunda mitad del siglo XIX cuando se empezaron a desarrollar soluciones más prácticas y seguras para el almacenamiento de gas. En este contexto, el gas licuado de petróleo (GLP), que incluye el propano y el butano, ganó popularidad debido a su capacidad de ser almacenado y transportado en estado líquido bajo presión, lo que reducía significativamente su volumen.

 

La evolución hacia los tanques estacionarios modernos

A medida que avanzaba el siglo XX, la necesidad de sistemas de almacenamiento más seguros y eficientes se hizo evidente. Los tanques estacionarios comenzaron a diseñarse con materiales más resistentes y sistemas de seguridad avanzados para prevenir fugas e incidentes. Estos contenedores se fabricaron para ser instalados en lugares fijos, como hogares, fábricas, y estaciones de servicio, donde se conectaban directamente a los sistemas de distribución de gas.

 

La importancia actual de los tanques estacionarios

Hoy en día, los tanques estacionarios son una vista común en muchas partes del mundo, sirviendo como pilares para el suministro de energía en hogares, negocios e industrias. Su diseño y tecnología han avanzado significativamente, incorporando materiales de alta resistencia, revestimientos especiales, y sistemas de monitoreo electrónico para garantizar su seguridad y eficiencia.

Los tanques estacionarios no solo simbolizan el progreso tecnológico en el almacenamiento de energía, sino que también reflejan el compromiso continuo con la seguridad, la eficiencia energética, y la sostenibilidad en nuestra sociedad moderna.

En la División Gas y Energía de Grupo GUMA,  nos apasiona la constante innovación en la industria gasera.